jueves, 28 de mayo de 2009

Pintar de blanco un tapiz de plastilina, modelar con cera las goteras del tejado, apagar las sombras de la mañana, evaporar la tinta de todos los calendarios. En definitiva, jugar a imaginar...

domingo, 24 de mayo de 2009

Punto y seguido...

Un domingo de ida y vuelta, con las interferencias de la radio sonando de fondo en una habitación con la persiana levantada, un cuaderno manchado con la tinta de un bolígrafo sin tapón, el ruido de los coches al pasar y el segundero de un reloj atrasado a propósito...

miércoles, 20 de mayo de 2009

Desde fuera


Una canción para expresar todas las marcas que se quedaron en el primer bar cuando un portazo dejó que la habitación se inundara de miradas ausentes, buscando nubes con formas y colores en el anochecer de pasado mañana. Salir con la prisa como antifaz...

viernes, 15 de mayo de 2009

Sin excepciones


Un mensaje lanzado al viento, contando los segundos que pasan por la cuerda floja. Quedarse colgado de un sentimiento y que nadie sea aliado del olvido mientras tatúo una ilusión en tu mirada. Perdona que me importes.

Ayer te vi


Jugar en dos direcciones, condensar un sentimiento dentro de un cubo de plástico algo deformado por el paso del tiempo. Recomponer esa foto de tu cartera que apenas se diferencia por el desgaste de una mirada perdida. Estirar y grapar un deseo a un corcho con indicaciones de ayer. Encestar.

lunes, 11 de mayo de 2009

23 años de media

Una aventura que comienza en zapatillas de deporte, un esfuerzo compartido con miradas en silencio. La sensación de seguir, de pensar en terminar un reto que comenzó como un juego en una conversación quizá no tan inocente. Sobrepasar las barreras que esconden cordones anudados con fuerza, con la misma intensidad con la que el esfuerzo se ve recompensado al otro lado de la línea. Porque las palabras empujan a seguir…

lunes, 4 de mayo de 2009

12 de mayo!


Cuenta atrás en el calendario, a distancia de una realidad que huele a mechas de cohete prendidas con las miradas de todos los que nos se ven durante un año y regresan con la sonrisa escondida de volver a ser quien eran cuando el colegio estaba nada más cruzar la calle. Colores en la ropa y gargantas a pleno pulmón.