martes, 27 de diciembre de 2011

¿Y si es cierto...

que la tinta resbala en primera persona? ¿Y si es cierto que te echo de menos? Me dicen que escriba, que cuente historias, que escuche lo que nadie dice, que beba café con la mirada, usando pajita, pensando en el olor a leña de aquel pueblo que no me he atrevido a volver a pisar, en la sencillez de los juegos de niños, en ser caballito blanco, en lugares desconocidos, en esas manos que siempre me han cuidado, en sonrisas que me hablan. Estoy en ello. Vuelvo a casa y me dejo llevar por la ilusión de cada flor que aún lucha contra el hielo, por la esperanza de un silencio que me entiende, por los miles de detalles que me quedan por aprender, por las cosas que me siguen esperando, por la imaginación desbordada, por las hojas caídas en un otoño que ya caducó, aunque no en mi memoria. Ojalá supieras lo importante que sería lo imposible...

lunes, 19 de diciembre de 2011

¿Y mañana?

Momentos custodiados dentro de una botella, el compromiso de un abecedario incompleto, la sutileza de una ecuación en clase de Lengua, el deseo de las historias con sabor a atardecer, la complejidad de un mecanismo usado, la delicadeza de un reloj ausente, la inestabilidad de un dominó en vertical, la promesa de un testimonio marchito, el amanecer de una flor, la oscuridad de un libro que huele a reciente, la ignorancia de qué pasará mañana...

lunes, 12 de diciembre de 2011

Desde...hasta...

Miradas de irrealidad, pensamientos aislados del ruido de la calle, cristales transparentes, vaho bajo los balcones, el anhelo de un día, encoger la distancia, deporte al otro lado de la carretera, verticalidad, flores meridionales, lunas septentrionales, respuestas sin errores, cometas sobre la hierba, el amanecer de un sueño, ceniza sobre las olas, el despertar de una mirada que se esfuma entre la niebla, un menos que se adueña del mañana, un paso que pensar, una huella que olvidar... noches de hilos sin enhebrar

jueves, 8 de diciembre de 2011

Quizá... solamente quizá

Quizá por romper con la rutina, quizá por escapar de las miradas, quizá porque es más sencillo teclear sobre el ordenador, quizá porque a veces merece la pena dar un paso al frente, quizá porque quien te apoya se merece un gracias, quizá porque los libros buscan un escenario donde dejarse ver, quizá por todo eso, o por nada... aquí te presto una pequeña parte de todo lo que muchas veces quise decir y no supe... 21 rotos para 7 descosidos

lunes, 5 de diciembre de 2011

Here

Un instante para las palabras, para los truenos insonoros, para las sillas de tres patas, para las sonrisas ampliadas, para los deseos que aún no han llegado, para las buenas noticias, para las más complicadas, para el calor en una tarde bufanda y café con hielos, para los destellos de una farola oxidada, para la inocencia de un libro con puntos suspensivos, para la alegría silenciada, para los guiños de la noche y las certezas del desayuno, para las escenas que vuelven al pasado, para las calles que custodian tus huellas, para el banco de debajo de casa, para las conversaciones que siguen echándote de menos, para las ideas, para detener los relojes de arena, para tantas cosas...

jueves, 1 de diciembre de 2011

Pilas recargables

Un punto y coma de dos días, un paréntesis anestesiado de subidas y bajadas, un pulso compartido, un mordisco vertical o quizá el deseo de algo horizontal... El dolor de un instante que suena a despertar, el crujido de un pie que ladea, la ilegalidad de un circunloquio... Un instante al cobijo de un sol que dura mucho más que un día, el cuidado de una mano que no te deja caer sin ni siquiera tocarte... Palabras en los ascensores, escritas con pinturas de colores, con ilusiones irreales, con la certeza de que hoy puede ser un sí... Miedos diluidos en espuma!!!