viernes, 26 de diciembre de 2008

Pantalla


Una historia en dos idiomas. Luces transparentes y un susurro escondido cuando la línea infranqueable pierde su grosor. Un pie al otro lado de la frontera y el aliento de saber que un instante puede ser decisivo para marcar el pulso de cien latidos por minuto. El aliento y los pies sobre el sillón, coordenadas sin dirección y filtros con agujeros.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Chin, chin!


Hoy toca emborrachar mis sentidos y respirar con fuerza cuando mis manos se estremezcan al rozar la brisa del otro lado de la línea. Conversaciones nunca habladas quedaron bajo sello al compás de un villancico de nochebuena. Mi Navidad empieza con ese brindis currela...

martes, 23 de diciembre de 2008

Menos es más


Ir, volver, estar. El anhelo de vivir al revés frivoliza con los intermitentes de un aeropuerto apagado y sonrie cuando canta las 80 canciones de un CD medio rayado. Correr más deprisa que el segundero de los relojes que gobiernan la ciudad y darle cuerda a los pulmones minuto a minuto para gritar desde la distancia que el turrón no cambiará. Nunca 150 km. estuvieron tan cerca.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Uno más



Simplemente una mirada, un guante en la pared, una sinopsis que no existe y que se inclina hacia el lado que no debe hasta que una voz te mira y recuperas de repente. Pilas o batería, qué más si la carga merece la pena!!!

lunes, 15 de diciembre de 2008

Ante la pared

Un papel en blanco y chinchetas sin nada que sujetar.

sábado, 13 de diciembre de 2008

1.200 km!


La sensación del silencio a través de la lluvia corta un momento único y divide por la mitad los segundos de un sueño a medio pulmón. La soledad de la que se huye en ocasiones, se disfruta el doble cuando un guiño se adhiere al vaho de los cristales teñidos por el frío del exterior. Un pulso contrarreloj que termina a medianoche, cuando los días regresan a su rutina y el cansancio se apodera de los sueños que esperan bajo la almohada...

martes, 9 de diciembre de 2008

Tras tres mensajes...


Cuando no tienes tiempo, cuando las prisas se agolpan en tu agenda y las letras se amontonan, es entonces cuando no puedes dejar de pensar en esa escapada que se asoma por la ventana de un cristal empañado debido al contraste de la calefacción. Un encuentro más o menos preparado, casual si se prefiere, la verdad es que no importa cuando sirve para recordar las mañanas de cura de insomnio entre apuntes, miradas furtivas y una pizarra medio vacía. Volver a lo de siempre sin dejar de caminar. ¿Volveremos a quedar? El año que viene...

domingo, 7 de diciembre de 2008

Al contrario, otra vez


Ojala fuera complicado echar de menos. En ocasiones, muchos aprovechan las cosas que pasan por su mente para convencerse de que apenas disponen de tiempo para darse cuenta de quién falta. Por ese motivo, se inventan decenas de historias en contra de la física más pura. Un día tiene 24 horas y empeñarse en robarle tiempo al infinito para no enfrentarse a los kilómetros que separan el otro lado de la ciudad no hace que el silencio hable. Ayer vi un bache en la acera.

jueves, 4 de diciembre de 2008

Con el humo


Pescar o darle la vuelta al jersey. Dos acciones y una manera de mirar al frente. Cumplir años, una excusa perfecta para regresar al sofá donde las charlas son interminables, a la sala donde la bebida se comparte y la coca-cola vence el pulso al segundero del reloj que vigila encima de la televisión, encendida y sin sonido. El frío se cuela por los resquicios de la ventana cuando el humo de un cigarro se consume en el alféizar y las historias de hace unos meses se hacen presentes. Cada camino marca unas pautas, riesgos, desafíos, pasos... pero cada cierto tiempo, brinda la oportunidad de detenerse en un área de servicio. Allí, se escuchan palabras que ayudan a repostar. Si el tiempo se niega a detenerse, hazlo tú.