martes, 30 de septiembre de 2008

El mejor escondite



El reto de jugar al escondite te ponía nervioso, como cuando una ola te arrastraba sin tu permiso mar adentro creando un pulso entre lo permitido y lo prohibido. De la misma manera, con los nervios de acero, el estómago encogido y el ingenio a flor de piel, te ocultabas tras uno de los setos de tu barrio, aquel tan grande que ya no existe, y procurabas no hacer ruido mientras te buscaban por todos los rincones. Era divertido ver sin ser visto, escuchar sin ser oído, no estar pero estar, sentirte a salvo en definitiva. Por ello, hoy quiero dar las gracias a quienes siguen jugando al escondite conmigo detras de sus rincones favoritos, aunque no estén a la vista. Uno, dos, tres... ¿Jugamos? -yo también me sé esconder-

lunes, 29 de septiembre de 2008

Un día gris


Como un cuadro colgado en la pared de una casa abandonada. Un acuerdo entre clavo y lienzo para desaparecer a la vez, una mueca que les hará caer hasta sonar de modo estrepitoso contra el suelo. Y de repente, sueñas. El vacío de la lámina te obliga a mirar a través de un cristal recién comprado. Es entonces cuando levantas la vista y cruzas una leve mirada con un desconocido en la acera de la calle donde vives. Sueñas despierto mientras esperas la luz verde del semáforo y te encantaría preguntarle al extraño por qué su pelo te recuerda a ese amigo que no ves desde hace meses. Cualquier excusa es buena para no despertar... cinco minutos más-

Botellines de cerveza a un euro

¿Qué sucede cuándo ocurre algo fuera de tu alcance, de tu control, de cualquier expectativa? Sudor frío, caliente, sudor de nuevo, nervios de acero, templanza externa y un volcán interior, más sudor y la sonrisa incrédula de lo que ves. Ocho grados en el exterior, tensión y, al final, una anécdota que contar y mucho que aprender. ¿Un brindis?

sábado, 27 de septiembre de 2008

Cada dos minutos...


Sueños que se evaporan en la atmosfera indiciplinada de un concierto. Saltos, gritos, el caos que te apasiona... Todas las letras de las canciones que nos hicieron reir en un coche, que conocimos de rebote de aquel chico "raro" que escuchaba grupos alternativos. Una melodía en la cabeza y cientos de notas que golpean contra las cuerdas vocales en busca de un orificio por el que escapar. La voz ronca de vocear a coro con los tuyos canciones con mayor o menor significado. Una historia que se repite en los portales y que acaba con más de un brindis cerca de la barra de un bar lleno de gente que quizá no encaja, pero que, por una noche, es feliz. Y ya se sabe, cada dos minutos una nueva estrofa...

viernes, 26 de septiembre de 2008

Día que no fue

Maldita la hora en que sólo funciona un qué tal y un hasta luego.El deseo, enfriado bajo el sol de enero, llueve, provocando que el beso, casi estafado, parezca ser el último.No lo saben, mienten para no hacerse daño. No se atreven a robarse algo más de tiempo.Sueñan. Expertos en mundos pararelos, donde sólo es realidad aquello que no decir a la cara.En el papel, un lágrima cae desencajada.Y Kafka en los labios, para lo que pudo ser un día perfecto

miércoles, 24 de septiembre de 2008

365 días de aventura


Pamplona. Un destino que pensé para cuatro años y que continúa en mi mente. Tanto me he acostumbrado a sus pequeños detalles que me resulta raro pensar en otra alternativa. Rutas en bici, cuevas escondidas, un teclado más o menos espeso, el día a día... todo se mueve en el suelo. Me encanta. Aquí estaré, 365 días al menos, toda una aventura. Suerte y a por ello...