Tocar una guitarra a la que le falta una cuerda y evitar saber quién finge esperar para entender las palabras que se quedan a medio camino entre una rima y una canción escrita en acordes caducados. Como una leyenda de alquiler que aparenta existir cuando no sabe ni cómo aceptar que la batalla de los sentimientos se pierde entre el ego de los más valientes o qué significa estar atado a la primera página de un libro inventado en tu mente. Escribir y seguir de noche una voz encerrada tras la conquista de un abecedario más sencillo que el actual.
2 comentarios:
Escribir, escribir y escribir... Divinas palabras :)
¿Qué tal todo guapa??
Al final este fin de semana me quedo en Madrid, iré el puente.
Muaaak!
Hola
Jolin, tengo millones de ganas de verte, en serio... En cuanto vengas, llámame! Además el puente me quedo aquí, que me toca DN. Un abrazo super fuerte!!!!!!
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