jueves, 1 de diciembre de 2011

Pilas recargables

Un punto y coma de dos días, un paréntesis anestesiado de subidas y bajadas, un pulso compartido, un mordisco vertical o quizá el deseo de algo horizontal... El dolor de un instante que suena a despertar, el crujido de un pie que ladea, la ilegalidad de un circunloquio... Un instante al cobijo de un sol que dura mucho más que un día, el cuidado de una mano que no te deja caer sin ni siquiera tocarte... Palabras en los ascensores, escritas con pinturas de colores, con ilusiones irreales, con la certeza de que hoy puede ser un sí... Miedos diluidos en espuma!!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Baterías llenas

Alba García Martínez dijo...

Me gusta muchísimo, lleno de sentimientos.