lunes, 9 de mayo de 2011

Cuando cien suman algo más...

Un ordenador imprudente. Teclea sin tregua un cúmulo de recuerdos, aromas, noches de luna creciente, brisa cálida del norte, miradas que hablan, cansancio entre piedras que se deslizan en contra del asfalto, un zigzag entre charcos y troncos, aplausos que se sienten, tiempos y distancias que hace una semana parecían impensables. Un ordenador que insiste en la seguridad de llevar el corazón en cada una de las carreras para que nunca se olvide el verdadero ritmo de cada momento, invitándote a correr, caminar, andar o reposar mirando al infinito, hacia ese punto donde han colocado una meta que hoy se ve un poco más distante. Cien pulsaciones recuperadas justo a tiempo para sonreír y darte las gracias.

No hay comentarios: